La inteligencia artificial ya dejó de ser promesa para convertirse en uno de los motores centrales de la transformación digital. Según un informe de Gartner, el gasto global en IA alcanzará los 1,5 billones de dólares en 2025, casi un 50 % más que en 2024, y superará los 2 billones en 2026. Las cifras no solo muestran la magnitud del fenómeno, sino también cómo la IA se integra de manera transversal en infraestructura, software y dispositivos de consumo.
Lo que dicen los números
El informe de Gartner detalla un crecimiento sin precedentes en distintas categorías de inversión:
• Servidores optimizados para IA (GPU y aceleradores): de 140 mil millones en 2024 a más de 267 mil millones en 2025.
• Aplicaciones de IA: de 83 mil millones a 172 mil millones en el mismo período.
• Software de infraestructura (desarrollo, almacenamiento, seguridad): de 57 mil millones a 126 mil millones.
• Modelos de IA generativa: de 5,7 mil millones a 14,2 mil millones.
• Smartphones y PCs con IA integrada: más de 388 mil millones en conjunto en 2025.
La conclusión es clara: el gasto ya no se concentra solo en la nube, sino que se expande hacia dispositivos y aplicaciones que usamos a diario.
Los motores del crecimiento
• Infraestructura crítica: centros de datos, GPUs y hardware especializado.
• Productos de consumo: smartphones y PCs con funciones de IA cada vez más visibles.
• Competencia global: hyperscalers, empresas chinas y nuevos jugadores impulsan la carrera.
• Capital de riesgo: grandes rondas de inversión alimentan el ecosistema de startups IA.x
Los desafíos en el horizonte
No todo es crecimiento lineal. Gartner advierte que:
• El retorno de la inversión aún no está claro para muchas empresas.
• Los cuellos de botella de hardware y energía pueden ralentizar la adopción.
• La integración forzada de IA en productos genera dudas sobre su valor real para el usuario.
• Riesgos éticos y de privacidad siguen siendo temas abiertos.
Qué significa para las empresas
• Grandes corporaciones: deben planificar su infraestructura y alianzas estratégicas con proveedores cloud.
• Pymes: conviene apostar por soluciones SaaS que integren IA sin necesidad de inversiones masivas.
• Consumidores: recibirán dispositivos con funciones de IA cada vez más integradas en el día a día.
• Gobiernos y reguladores: enfrentan el reto de generar estándares y políticas claras.
Mirando al futuro
Gartner proyecta que el gasto en IA superará los 2 billones de dólares en 2026, impulsado por la maduración de modelos generativos, la expansión de hardware especializado y el avance de la IA en el borde (edge AI).
La pregunta que queda abierta no es si la IA transformará la economía global, sino cómo y quiénes capitalizarán mejor esa transformación.


