Por Gustavo Molinatti
Invitada por Static Control Components, Guía del Reciclador viajó a los Estados Unidos para visitar sus oficinas centrales en la ciudad de Sanford, Carolina del Norte.
Static Control goza de una posición bien ganada. Como todo líder de este o cualquier otro mercado, genera opiniones distintas, versiones encontradas, pero no conozco a nadie que no lo identifique como uno de los mayores fabricantes de sistemas de imágenes para la remanufactura a nivel global.
Durante más de una década recorrí la región latina y puedo dar fe que muchos de sus clientes suelen ser referentes en cada uno de sus mercados. A pesar de ser todas empresas distintas, mantienen un denominador común, algo que siempre los identifica del resto, en especial en su visión acerca de los paradigmas de este negocio y de su futuro. Incluso todos ellos coinciden en involucrar a Static Control a la hora de enumerar las claves de su éxito, destacando la calidad y confiabilidad de los productos, el soporte en Investigación y Desarrollo que hace de cada uno de los insumos que lanza al mercado, el respaldo en materia de Propiedad Intelectual y la asistencia y entrenamiento de sus empleados.
¿Solo para los grandes?
Durante mucho tiempo se comentó que solo las grandes empresas, los grandes “compradores” de este gremio podían ser parte de su clientela. El tiempo se encargó de demostrar que esto era tan solo un mito. Recuerdo haber conversado sobre este tema en mi anterior visita a Sanford, allá por febrero de 2008, con Ed Swartz, fundador de Static Control Components, quien falleciera en noviembre de 2013. Ed era consciente de este mito y estaba preocupado en ver de qué manera poder llegar a cualquier remanufacturador del continente, más allá del volumen de su orden de compra. Hoy la firma, liderada por sus dos hijos Bill y Michael, atiende a todo tipo de empresas, desde pequeños emprendimientos familiares a grandes distribuidoras.
"Servimos a los remanufacturadores más grandes en la industria así como a los más pequeños, cada día y en más de 150 países", nos comentó Bryan Bonacum, Vicepresidente de ventas en los Estados Unidos. “Muchos de esos clientes han estado haciendo negocios con Static Control durante más de 20 años. Hemos crecido con ellos y muchos de los que hoy tenemos y que están creciendo son los mismos que hemos tenido desde el primer día, siempre enfocados en la calidad y no en el precio".
Guía del Reciclador en Sanford
Llegar a las oficinas de Static Control implica un largo viaje. La escala en algún aeropuerto intermedio es inevitable para quienes viajamos desde fuera de los Estados Unidos, llegando finalmente al Aeropuerto Internacional de Raleigh, localizado a unos 15 km de Morrisville, Carolina del Norte y entre las ciudades de Raleigh y Durham. Desde allí resta conducir poco menos de una hora hasta Sanford, atravesando autopistas y algunos tramos de rutas internas bordeadas de pinos, que me hacen recordar a las viejas canciones de James Taylor. Al llegar y ver los distintos edificios que conforman las facilidades de Static Control, es inevitable pensar cómo fue posible construir una empresa de semejante envergadura en un sitio tan despoblado.
Vea el artículo completo, click aqui.