Desde que en el mundo existen impresoras de inyección de tinta, los usuarios que quejan básicamente de lo mismo: la “efímera” duración de los cartuchos de tinta, que tienen que reponer mucho más a menudo de lo que les gustaría.
Y si esto es un inconveniente en el mercado doméstico, lo es aún más en el terreno de las pequeñas empresas, donde lógicamente el volumen de impresión es mayor. Para acabar con la “dictadura” del cartucho pero a la vez seguir obteniendo un resultado de gran calidad, EPSON puso en marcha en 2014 la tecnología Epson Ecotank un sistema que cambia los cartuchos de tinta por depósitos integrados en la impresora.
Al estar integrados en los equipos, la tinta se suministra de forma continua a la impresora por lo que el usuario únicamente debe preocuparse por rellenar los depósitos con las botellas de tinta de Epson y seguir imprimiendo.
Para rellenar los depósitos, se puede adquirir más tinta en botellas de gran capacidad con inyectores antigoteo y tapones enroscables que permiten un almacenamiento seguro. En el caso de la Epson Ecotank ET–4550 la capacidad de impresión llega hasta las 11.000 páginas sin necesidad de volver a rellenar los depósitos, todo un récord en el segmento de la inyección de tinta.
Rellenando los depósitos de tinta
Al ser un sistema diferente, la puesta en marcha de esta Epson Ecotank ET–4550 varía bastante con respecto a lo que estamos acostumbrados.
En vez de encender la impresora e insertar los correspondientes cartuchos de tinta, en este equipo deberemos literalmente vaciar las botellas (negro, cyan, amarillo y magenta) en sus correspondientes depósitos.
Para hacerlo correctamente Epson proporciona instrucciones detalladas de todo el proceso. Un proceso en el que a pesar de contar con botellas antigoteo, deberemos ser cuidadosos ya que las opciones de mancharnos o verter parte del líquido fuera del depósito están presentes. Especialmente recomendable es seguir el consejo de utilizar los guantes de plástico que también se incluyen junto a la impresora.
Otra recomendación que nos ofrece la propia Epson es que dado la naturaleza de los depósitos de tinta, no resulta demasiado aconsejable mover la impresora, transportarla o agitarla por lo que si necesitamos trasladarla por ejemplo a otro departamento, lo más sensato es hacerlo utilizando la caja del packaging original.
A cambio de estas pequeñas molestias, la buena noticia es que completado con éxito el proceso, podremos despreocuparnos de volver a hacerlo durante aproximadamente dos años, lo cual no está nada mal cuando hablamos de este tipo de equipos.
Ideal para pequeños grupos de trabajo
Con unas dimensiones de 51.5×55.8×24.1cm y 7.39 kg de peso, la Epson Ecotank ET–4550 está pensada para dar el máximo en pequeñas oficinas o en grupos de trabajo de no más de diez personas.
Entre sus funciones, además la impresión, encontramos la copia y escaneado de documentos y la posibilidad de enviar fax. Una última función que si bien a muchos puede parecer un tanto anacrónica, sigue siendo requerida por muchas empresas de todo el mundo.
En el terreno de la conectividad, la ET–4550 tiene conectividad inalámbrica WiFi que nos permitirá imprimir directamente desde las Apps que la marca ha desarrollado tanto para iOS como para Android, además de soporte para Apple Airprint, Google Cloud Print, Kindle Fire Printing y Mopria, el nuevo estándar de impresión que se integra en la mayoría de dispositivos Android.
Si preferimos la conectividad física con nuestro equipo, podremos utilizar conectividad ethernet (100 Mps) o el clásico cable USB, si bien es cierto que a menos que el volumen de impresión sea más que considerable, la conectividad Wi-Fi es todo lo que necesitamos para imprimir sin ningún tipo de problemas.
Para manejar el equipo dispondremos de un pequeño display monocromo (no táctil) y teclas físicas con las que nos desplazaremos por los distintos menús. La navegación es fácil e intuitiva y no resulta nada complicado encontrar en todo momento la función que más nos interesa.
A la hora de imprimir, la Epson Ecotank ET–4550 se ofrece una bandeja de 150 páginas, alimentador automático de documentos (ADF) de 30 páginas, e impresión a doble cara automática. Las copias monocromo se imprimen a una velocidad de 13 páginas por minuto mientras que las páginas en color se imprimen a una velocidad de 7,3 por minuto.
Ni las velocidades de impresión, ni la cantidad de hojas que almacena en la bandeja son datos que harán de este equipo una impresora histórica. Sin embargo y como hemos apuntado al principio, el ahorro de costes derivado de sustituir los cartuchos de tinta por la tecnología Epson Ecotank, supone un plus que puede marcar la diferencia en muchas empresas.
Fuente: www.muypymes.com