Epson, junto con sus filiales estadounidenses Epson America, Inc. y Epson Portland Inc., ha presentado dos denuncias amparadas en la Sección 337 ante la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (ITC), acusando a 20 empresas de infringir múltiples patentes relacionadas con sus cartuchos de tinta.
Los casos, designados temporalmente como Investigaciones n.° 337-TA-3827 y 337-TA-3828, marcan el regreso de Epson a la ITC por primera vez en una década en relación con consumibles para impresoras, tras sus acciones previas en 2006 y 2014. Epson solicita a la ITC que emita una Orden de Exclusión General (GEO), una Orden de Exclusión Limitada o una Orden de Cese y Desistimiento para prohibir la importación y venta de los productos presuntamente infractores en Estados Unidos.
Los 20 demandados nombrados en las denuncias son idénticos en ambos casos. Según datos de direcciones disponibles públicamente, 18 de las empresas tienen su sede en China continental o Hong Kong, y solo dos están ubicadas en Estados Unidos. Cabe destacar que algunas de las empresas acusadas ya habían sido objeto de medidas de control de aduanas de EE. UU. por infringir una Orden de Exención de Impuestos (GEO) emitida en el caso 337-TA-946.
En las dos nuevas demandas se citan un total de 10 patentes estadounidenses. Estas patentes se relacionan principalmente con la tecnología de contacto eléctrico utilizada en los chips de los cartuchos de tinta. Cada patente cubre elementos técnicos clave presentes en los cartuchos de tinta y sus componentes electrónicos.
Un análisis inicial de los encuestados sugiere que se trata principalmente de pequeñas y medianas empresas (pymes), incluyendo varios vendedores de comercio electrónico. Esto coincide con una tendencia creciente desde el caso 337-TA-1174, en el que los fabricantes de equipos originales (OEM) se han centrado cada vez más en las empresas más pequeñas, que a menudo carecen de los recursos financieros para organizar una defensa legal sólida.
Los expertos advierten que es probable que muchas pymes incumplan los procedimientos, lo que aumenta la probabilidad de que la ITC emita rápidamente una orden de no admisión a trámite (GEO). Dicha orden prohibiría la entrada a EE. UU. de todos los productos infractores, independientemente del fabricante, lo que podría suponer un duro golpe para la industria de suministros de impresora del aftermarket.
Dado el posible impacto en el mercado mundial de cartuchos de tinta, los analistas instan a las empresas afectadas y al sector en general a que se tomen en serio las demandas y preparen una respuesta legal y regulatoria coordinada. De no hacerlo, podrían producirse importantes perturbaciones en la cadena de suministro y una menor competencia en el mercado estadounidense.
