Por Ing. Cássio Rodrigues, Supplytech, ICR y Fábio Sillos, Sideral Suprimentos
Este artículo es fruto de una “elucubración mental” entre mi amigo Fábio Sillos y yo, sobre cómo poder ayudar al sector a superar la crisis. Comenzamos inicialmente por 10 consejos, pero luego vimos que 17 sería el número mágico, no por cuestiones de cábala sino porque tenemos que prepararnos para el 2017, año en que la mayoría de los especialistas en economía están proyectando el retorno del crecimiento económico de nuestro país, el Brasil. Entonces, ¿por qué esperar hasta el 2017 si podemos comenzar hoy?
1. Estudiar nuevas estrategias de gestión
Para tener éxito en tiempos de crisis y en tiempos de alta velocidad de información, los pequeños empresarios tienen que pensar en “grande” y los grandes empresarios deben “actuar como pequeños”. Es decir, los pequeños empresarios deben reestructurar su estrategia a fin de aumentar la calidad de los productos finales, teniendo en cuenta la mejoría del proceso como un todo, además de aumentar el conocimiento de todo el proceso. Y por su lado, los grandes deben volver a la línea de frente, haciendo el tan famoso “cuerpo a cuerpo”. De esta forma, cuando esta crisis disminuya, los preparados saltarán en la cara de su competencia.
2. Eliminar desperdicios y gastos necesarios
Cuando hablamos de eliminar desperdicios, nos referimos al uso indiscriminado de materiales de oficina, de recargas sin criterio, etc. Por ejemplo: un cartuchos usa 100 gramos de recarga y Ud. no posee un control de peso o bien usa siempre el “un poco más”. Ese exceso o descontrol a fin de mes puede ser uno de los principales coladores de su producción. El cartucho no rinde tanto como se espera, su cliente no entiende esa mejoría en la cantidad de copias (él puede hasta inclusive reclamar por qué el cartucho chorrea) y si Ud. no coloca ese exceso en su costo será un perjuicio directo.
Eliminar desperdicios o lo que llamo “coladores”, es una tarea compleja, principalmente para los que están involucrados en el día a día de la empresa y de los procesos productivos. En este caso contratar “ojos entrenados” de consultores con experiencia puede ayudar mucho en esta etapa. Una consultoría bien hecha se paga sola en poco tiempo.
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