HP Q3 2025: El auge de los AI-PC empuja el crecimiento mientras la impresión pierde fuerza

PCs en alza e impresión en descenso, ¿Fatiga del mercado o mejores oportunidades posventa?

PCs en alza: el efecto Windows 11 y la ola de la inteligencia artificial

Los resultados del tercer trimestre de HP destacan el aumento en las ventas de PCs y un sólido flujo de caja, pero la división de Impresión volvió a caer, lo que subraya la fatiga del mercado, el papel de Microsoft en la obsolescencia de las impresoras y las crecientes oportunidades en el mercado posventa.

Los ingresos totales de la compañía ascendieron a 13,9 mil millones de dólares, con un crecimiento interanual impulsado sobre todo por la categoría de Personal Systems. Este segmento, que incluye PCs de consumo y empresariales, registró un incremento del 6 %, reflejando el impacto del fin de soporte de Windows 10 y la transición acelerada hacia Windows 11.

La tendencia también se alimenta de una nueva generación de equipos con capacidades de inteligencia artificial, bautizados como AI PCs, que han comenzado a marcar la pauta en el mercado. Tanto consumidores como empresas ven en ellos un salto en productividad y colaboración, lo que anticipa un ciclo de renovación aún más amplio en los próximos trimestres.

Además del repunte en ventas, HP consolidó un flujo de caja sólido y continuó con su política de retorno de capital a los accionistas, confirmando que la estrategia de diversificación geográfica de su producción —con más presencia en México y el sudeste asiático— está dando frutos.

Impresión: un mercado que acusa cansancio

En contraste, la división de impresión cayó un 4 % interanual, con retrocesos tanto en hardware como en suministros. Las unidades de impresoras descendieron cerca de un 9%, afectadas por la menor demanda tanto en el segmento de consumo como en el corporativo.

El mercado parece mostrar claros signos de saturación, con ciclos de renovación cada vez más largos y usuarios más conscientes de los costos asociados al reemplazo de equipos y consumibles. Este escenario alimenta la percepción de fatiga estructural en el negocio de impresión, que ya no logra compensar con programas de fidelización ni con propuestas de suscripción de insumos.

Entre la obsolescencia y la oportunidad

El fin de soporte de Windows 10 también impacta en este terreno, ya que muchas impresoras más antiguas quedan rezagadas frente a los nuevos sistemas operativos, acelerando la necesidad de reemplazo. Sin embargo, este movimiento no siempre se traduce en ventas inmediatas para HP, ya que muchos clientes exploran opciones más económicas en el aftermarket o eligen mantener sus equipos el mayor tiempo posible.

Esto abre un espacio interesante para el aftermarket de insumos y repuestos, que encuentra terreno fértil en un contexto donde el consumidor busca prolongar la vida útil de sus dispositivos y reducir costos.

La ruta hacia adelante

El panorama que deja este trimestre es claro: mientras HP capitaliza un ciclo expansivo en PCs con la llegada de la inteligencia artificial y la actualización de sistemas, su negocio de impresión enfrenta un reto cada vez más complejo. La clave estará en cómo logre reinventar su propuesta de valor en este segmento, explorando nuevos modelos de servicio y aprovechando la fidelidad de una base instalada que, aunque madura, sigue siendo enorme.