Prueba: ImagePROGRAF Pro-1000, excelente impresora profesional para color y ByN


A finales del año pasado os informábamos de que Canon iba a sacar al mercado una nueva impresora de su gama profesional, la Canon imagePROGRAF Pro 1000. Esa impresora ya está aquí. Es compacta, crea copias en blanco y negro o en color de calidad excelente, es rápida y es capaz de producir impresiones de tamaño de A2 sin bordes o lo que es lo mismo, con una superficie de 594×420 mm.

Hemos tenido la oportunidad de probar a lo largo de un par de semanas esta magnífica impresora para comprobar su calidad y rendimiento sobre distintos tipos de papeles y con diferentes clases de originales. El resultado global de esta prueba se puede definir con una sola palabra: impresionante. La calidad de las copias obtenidas con la imagePROGRAF Pro 1000 es tan alta que las imágenes podrían destinarse directamente a la venta o a ser colgadas en una exposición. Además, esta calidad es consistente tanto en las fotografías a color como en las de blanco y negro, un punto en el que muchas impresoras bajan la calidad de sus resultados ostensiblemente, pero no esta.

Aunque normalmente hay que dejar las conclusiones para el final, yo querría poner por delante que creo que este aparato es una opción absolutamente recomendable para profesionales, estudios y tiendas de fotografía (también para diseñadores y publicitarios) que necesitan producir personalmente copias de alta calidad de forma rápida.

Pero veamos con más detalle las características y posibilidades de esta gran impresora.

Características físicas
Para dejar claramente marcada la pertenencia de esta impresora a su línea profesional, Canon ha hecho que su diseño exterior incluya una línea roja sobre su cuerpo negro qué es el signo distintivo que también caracteriza a los objetivos de la serie L, es decir las lentes profesionales. Se puede decir que el diseño es sobrio y lo suficientemente neutro para encajar en cualquier espacio de trabajo profesional o doméstico.

La impresora Canon imagePROGRAF Pro 1000 es más grande que cualquiera de las impresoras PIXMA pero más pequeña que el resto de los aparatos de la línea profesional a la que pertenece. Esto significa que está concebida para ser situada sobre un escritorio, si bien es cierto que sus dimensiones requieren un amplio espacio de trabajo vacío alrededor. Concretamente la impresora mide 723 x 433 x 285 mm  y a esos 43 centímetros de fondo hay que sumarle otros 27 cm para desplegar la bandeja delantera por la que sale el papel y uno 30 cm por detrás para poder abrir las bandejas de entrada del papel. ¿Un espacio grande? sí lo es, pero resulta mucho más fácil emplazarla que cualquier plotter y es posible ponerla sobre una mesa de escritorio normal. Como es lógico, las dimensiones se traducen también en peso ya que este aparato alcanza los 32 kilos lo que hace necesaria la intervención de dos personas para el proceso de desembalaje y colocación sobre la superficie de destino.

El montaje de esta impresora es sencillo ya que se proporcionan instrucciones paso a paso sobre el proceso, no difiere básicamente del proceso de cualquier otra impresora de la gama Pixma. La principal diferencia respecto a otras impresoras es que resulta necesario instalar también el cabezal de impresión que viene separado y dentro del embalaje junto a los tinteros y el resto de elementos.


Acceso frontal y sencillo a los 12 tinteros de 80 ml de la impresora
La impresora carga 12 tinteros de 80 ml de capacidad cada uno. Once corresponden a las tintas pigmentadas Lucia Pro y el duodécimo es el optimizador de brillo. El amplio tamaño del cabezal de impresión, 1,28 pulgadas,  hace que el aparato sea capaz de producir copias de gran tamaño en un tiempo bastante reducido mientras que el amplio número de tintas asegura una excelente reproducción cromática y tonal tanto sobre soporte brillo como mate.

La impresora dispone de 2 bandejas para la entrada de papel, ambas posteriores. Hay una entrada llamada “posterior”, que se puede utilizar con papeles normales y es capaz de alojar hojas desde 10×15 centímetros hasta el tamaño A2, y una entrada manual para introducir papeles de arte gruesos. En ambos casos, tanto la colocación del papel como su tracción es sencilla y eficiente. A diferencia de otras impresoras, esta no cuenta con un sistema para alimentarla con papel en rollo por lo que el tamaño máximo posible es el A2 sin que se puedan imprimir panorámicas de dimensiones superiores.

Además de estas características externas, en su interior la impresora viene dotada de un sistema de absorción por aire para fijar la posición del papel mientras que se imprime sobre él. Igualmente, la electrónica de este aparato es capaz de detectar fallos en la impresión por la obstrucción de un inyector (el típico fallo que nos dejara una línea blanca sin imprimir a distancias regulares) y compensarlo en tiempo real con la acción de otros inyectores de modo que no se desaprovecharía ninguna hoja de papel por este tipo de fallo.

Excelente calidad de impresión
Además de la electrónica, la responsable directa de la calidad de impresión de las copias producidas por la ImagePROGRAF Pro 1000 es la tinta, su calidad y su número. Este aparato se alimenta con las tintas pigmentadas Lucia Pro que son las de mayor calidad producidas por Canon.  Lleva en total  11 colores que son: Negro mate (MBK), Negro para foto (PBK), Gris (GY), Gris para foto (PGY), Cian para foto (PC), Cian (C),Magenta para foto (PM), Magenta (M), Amarillo (M), Rojo (R) y  Azul (B). Además hay también un cartucho de optimizador de brillo (CO) que no es un elemento baladí ya que, en realidad, sirve para dotar de profundidad a las zonas oscuras en papel brillante o satinado.

A lo largo de la prueba hemos usado los perfiles estándar proporcionados por Canon para cada uno de los papeles utilizados en la impresión, es decir, que no realizamos perfiles personalizados. Pese a ello, la calidad de las copias realizadas en papeles brillo, satinados y mate ha sido excepcional.

En mi experiencia, es normalmente en la realización de copias en blanco y negro donde la mayoría de las impresoras suelen mostrar su punto débil bien porque aparecen dominantes de color o bien porque la profundidad tonal resulta escasa o las gradaciones de grises algo escalonadas. No es desde luego el caso de la ImagePROGRAF Pro 1000. La impresora ha sido capaz de producir copias en blanco y negro que habrían hecho feliz al mismísimo Ansel Adams y cumplido con la exigencia de su sistema de zonas ya que la profundidad tonal de los grises es grandísima, con gradaciones muy suaves y sutiles, mientras que cuando se llega a la zona de negros la impresora es también capaz de reproducir detalle en las sombras profundas. Como es lógico, esa profundidad en los detalles de las sombras resulta especialmente apreciable sobre los soportes brillantes y satinados ya que, por definición, los papeles mate por su naturaleza carecen de esa profundidad tanto en el blanco y negro como en el color.

La mayor parte de las impresiones que he realizado durante las pruebas han sido copias en color a partir de originales de estilo y características muy diferentes, y en los tres soportes utilizados: brillo, satinado y mate. Es un poco difícil entrar en describir objetivamente los resultados conseguidos, más allá de las abrurridas pruebas de carta de color donde, frente a la precisión del termocolorímetro, el ojo humano tiene difícil hacer apreciaciones realmente precisas. Subjetivamente, sí puedo decir que me han impresionado mucho los buenos resultados conseguidos.

En el caso de las fotografías de colores vivos y saturados (algunas conseguidas incluso mediante el tratamiento en LAB color que puede dar toonos supersaturados difíciles de reproducir) sobre soporte brillo o satinado, el resultado es excelente. Los rojos, los azules y los amarillos son muy vibrantes. En alguna copia de una fotografía con una gran superficie de azules con distintas tonalidades y zonas de sombra, el detalle en estas es excepcional y las gradaciones cromáticas extremadamente sutiles. En el otro extremo, he impreso fotografías de escenas brumosas y con bajo contraste sobre papel mate y el aspecto es absolutamente “artístico” y preciso. También idénticos buenos resultados con fotografías con suaves tonos pastel de rosas, magentas y fucsias. Además, en todos los casos, color y blanco y negro, brillo y mate, la reproducción del detalle más fino y pequeño es muy, muy precisa.


Excelente calidad de impresión también en Balnco y Negro

Velocidad de impresión
La velocidad de impresión de una fotografía sobre el papel depende del tamaño de la hoja, si se dejan o no bordes, la calidad de impresión elegida en el controlador, el tipo de superficie y, finalmente, las propias características de la imagen. Con tantos factores en juego es muy difícil responder de manera sencilla e inequívoca a la pregunta de ¿cuánto se tarda en imprimir una copia? ya que muchas respuestas diferentes serán igualmente válidas.

Quizás el dato más llamativo y que merece la pena resaltar es que esta impresora es capaz de imprimir una copia de tamaño A2 con bordes en unos 6 minutos lo qué es un tiempo prácticamente récord para esas dimensiones  ya que otras impresoras que hemos tenido la oportunidad de probar requerían en ese mismo tiempo para imprimir una copia en tamaño A3, es decir, la mitad de un A2.
Dicho esto, hay que señalar qué la consecución de los tiempos más rápidos es posible cuándo se elige  la calidad de impresión “Estándar” o “Alta” que, según el tipo de papel, viene denominada de una u otra forma en el controlador de la impresora. Por ejemplo, si estamos utilizando un Papel Fotográfico Profesional Platinum las opciones de calidad de impresión son dos: Alta y Más alta. Si se elige la calidad Alta conseguiremos el tiempo referido pero si optamos por la calidad Más alta ese tiempo se prolongaría considerablemente, incluso se elevaría muy por encima del doble.

Este extremo nos lleva a una consideración adicionanal que es importante hacer ya que, a simple vista, las diferencias entre una y otra calidad de impresión son prácticamente imperceptibles o cuando menos muy sutiles. Dicho de otra manera, esta impresora es capaz de conseguir unos resultados excelentes con la calidad de impresión “Estándar” o “Alta” lo cual nos permitirá trabajar con más rapidez y menor consumo de tinta, sin renunciar a resultados excelentes.

Características adicionales
Cómo era de esperar en una impresora de gama alta como esta, La ImagePROGRAF Pro 1000 viene dotada de una pantalla en color de 3 pulgadas desde la que es posible controlar las funciones del aparato, recibir los mensajes de alerta e incluso las instrucciones para montaje y desmontaje de tinteros y otros procesos que es necesario realizar .

Igualmente, el aparato dispone de conexión wifi para poder integrarlo en la red inalámbrica del estudio o la empresa. Esta misma conectividad inalámbrica le permite también entrar en contacto directo con dispositivos móviles como un teléfono o una tableta.  Con la aplicación adecuada, que está disponible tanto para Apple como para Android, se puede enviar directamente una fotografía a imprimir sin pasar por el programa de edición aunque, dicho sea de paso, no creo que una impresora de esta gama vaya a ser empleada por casi nadie para crear copias que no han sido previamente editadas en un ordenador.


Plugin Print Studio Pro gestionando la impresión de dos fotografías
sobre un mismo papel con bordes

Otro extra de software disponible para la  Image prograf pro 1000  es el plug-in Canon Print Studio Pro. Esta aplicación es un desarrollo de Canon que se integra en Photoshop y Lightgroom para permitir controlar la impresión de fotografías desde cualquiera de los dos programas. La utilización de este plugin facilita la configuración de la impresora que, con este o con cualquier otro modelo, resulta un proceso un tanto complicado especialmente para usuarios poco experimentados. Entre sus opciones figura “Usar reporducción de contraste” que mejora la impresió de imágenes contrastadas con alto nivel de detalle y textura. Puesto que estamos hablando de una impresora orientada al mercado profesional, no creo que esta aplicación resulte especialmente necesaria pero, en cualquier caso, nunca está de más tenerla y su uso resulta cómodo.

Lo que el plugin Canon Print Studio Pro hace con mucha eficiencia es controlar la impresión de varias fotografías sobre una misma pieza de papel. De esta manera el usuario puede escoger entre imprimir una fotografía, dos fotografías, tres o cuatro, con o sin borde, o incluso una hoja con 5 x 4 imágenes sobre una hoha de papel de determinado tamaño. Esta funcionalidad sí me paree que puede tener bastante utilidad y sirve para acelerar el flujo de trabajo ya que las fotografías se imprimen como si fueran una sola, sin esperas innecesarias entre una y otra.

Coste de impresora, tintas y papel
Como todo el mundo sabe, los precios fluctúan de unas tiendas online y offline a otras. En cualquier caso, el coste de esta impresora se sitúa en torno a los 1.200 €, una cifra que a algunos les parecerá alta y a otros asequible todo depende de la utilización y la manera de amortizar la impresora que cada uno vaya a hacer. Dato importante, en ese precio se incluye un juego completo de cartuchos de tinta de tamaño completo.

Como ocurre siempre con las impresoras, el otro precio importante a tener en cuenta a la hora de determinar si este modelo satisface nuestras necesidades y se ajusta a nuestro presupuesto es el de la tinta. Nuevamente aquí, las diferencias son muy importantes ya que yo he podido encontrar en internet una horquilla de precios que va desde los 50 a los 75 Euros por cartucho de tinta dependiendo del proveedor.  Dicho de otra manera, cambiar todos los cartuchos se nos pondrá entre los 600 y los 800 € aproximadamente. Lo que desgraciadamente no puedo calcular es el rendimiento real de los cartuchos en número de copias impresas.

Por lo que respecta al papel del tamaño máximo admitido por la impresora, su precio en Amazon va de los 68 € que cuesta la caja de Canon Photo Paper pro Premium Mate de 20 hojas A2 a los 95 € de una caja también de 20 hojas del papel Canon Pro Platinum A2. Por supuesto, la impresora puede utilizar también papeles de otros tamaños inferiores y de otros fabricantes cuyos precios varían muy significativamente.

Parece bastante evidente que para un presupuesto de aficionado el esfuerzo económico de adquirir y mantener la impresora y hacer copias con ella es algo alto. Sin embargo, si pensamos en un estudio profesional que vende sus copias, es muy posible que lleguemos a la conclusión de que los costes son más que razonables.


Lo suficientemente compacta para colocarla sobre un escritorio en el estudio o en casa

Conclusión
La Canon imagePROGRAF Pro 1000 Es una impresora profesional que produce excelentes resultados. Tanto en color como en blanco y negro sus copias son de altísima calidad con colores brillantes, gamas tonales amplias en suave graduación y negros y azules profundos pero con detalle en las sombras. Su velocidad de impresión en copias A2 es comparativamente alta. Su diseño compacto consigue que sea un aparato susceptible de estar colocado sobre un escritorio sin que desentone en un ambiente de trabajo o doméstico.

Fuente: www.fotografodigital.com